Abril en capital

"...un instrumento sin mejores resplandores

que lucecitas montadas para escena"

Cometas en carretera. // @CiertoZarco

Me llevo de ti un café donde Isa.

Traigo conmigo tus grados más bajos.

Retengo en mis labios el tráfico y por eso los llevo partidos.

Un corazón con remiendos y empujones se embate entre el agua caliente y una cama fría.

Me traigo el reflujo de seis de la tarde,

una maratón de cometas, de fugaces lucecitas de reparto.

Contengo los olvidos que más puedo entre las manos,

el estómago en Big Bang resulta pasarse un semáforo en rojo,

y te arrebato un par de sueños llanos. 

Me enseñas a caminar en zigzag y a mirar atrás en las esquinas.

Tan insignificante voy de anónimo en tus aceras, 

cargado de mantras ajenos: "la esperanza es una puta, siempre está dispuesta".

Me regalaste el rostro de ella en los mil rostros,

cuadraste el pico y placa justo cuando decidí moverme

entre el olor a nostalgia, el esmog y las vitrinas que me repiten

que nos repiten, que nos extrañan.

Lloviste si acaso y me dejaste clara la densidad del aire

cuando es esquivo. El sudor fue frío.

Bogotá, abril te regaló una semana rauda, 

y tú me la devolviste envuelta en un puñado de palomas,

una mañana templada y un cóctel de buenos augurios.