Pringamosa húmeda

Polvos verdes /@CiertoZarco

Por el sendero te desvestí y tenías los pezones un poco con sabor a miel con zanahoria y tenías frío pero el musgo fue nuestro aliado y olvidamos las termitas y los duendes que nos escondieron la ropa y los saltamontes que se animaron a ver el espectáculo de nuestros cuerpos camuflados en una docena de gemidos, uno que otro aruñón así bien peligroso, una halón de pelo así bien atraviésame el alma, una pregunta con replay ilimitado y una respuesta mordiendo el pómulo de la oreja hasta hacerlo sangrar. Oye, nunca te había dicho que eres como un polvo ecológico, tu vagina le hace un bien ambiental a mi pene, lo mantiene en desarrollo sostenible. Quédate al pastel y no me mires más con ese letrero que dice que te asusta que te haga volar cuando mis dedos rozan allá abajo porque puedo quitarte lo que acabé de ponerte hace unos segundos pero oye detente no te muerdas el labio de esa forma tan diabólica y esperemos que llegue porque sería inapropiado parar más adelante cuando nos encuentre y sepa que le tenemos guardado un poquito de sudor con tierrita y pringamosa ebria de contacto y ... mierda me vine otra vez y no te he tocado.