De la serie: Cosas de mariposas y otras güevonadas

Capítulo X: Comedia…

Por: Ana Botero

Comedia siniestra. Hoy les presentaré lo grotesco, lo siniestro, lo visceral, lo sexual. Qué expectativas tan ingenuas. La serie cosas de mariposas ha recorrido durante estos capítulos temas bastante insignificantes que poco o nada a usted le han importado. Mariposas, anacondas, jirafas, máscaras, moral, bosques rosados, abismos, Ñus y otras pendejadas o mejor, otras güevonadas.

Algunos de ustedes ya conocen este fantasioso relato. Lo presento porque en algún momento lo escribí por razones que ni quiero recordar y que, claramente, las he modificado. Claro, ya sé lo que usted piensa; a usted no le importa. Lo que vale es que el Zarquito me “conoció” por medio de esta comedia siniestra y quería que hiciera parte de la serie y, como escribir también es una forma de cagar y masturbarse, aquí les dejo para que se tiren al andén:

“- No le hice caso y en cambio me arrodillé ahí mismo, le bajé la cremallera, el pantalón y le saqué su apetitoso miembro. Empecé a chuparle su grande y grueso pene repitiéndome  - Tiene que ser el mejor que existe, tienes el pene mas delicioso del mundo, desde hoy seré su dueña. Nunca dejaré de chupártelo- y seguía lamiéndolo como un rico bom bom bum de mandarina solo que al terminar de comérmelo no saldría un chorro de chicle.

Dos días después mi boca incluía tres horribles llagas, cual volcán en erupción con materia incluída. Era verdad lo que me había dicho antes de arrodillarme. Cuando me vio con semejante prueba se tiró en un anden y se cagó de la risa. Yo lo seguí y nos quedamos una hora sentados con un terrible dolor de estómago consecuencia de las carcajadas. Ese día comprendí que yo no era normal."